Edad Contemporánea
Dehesa de Garoza

Intervención plástica realizada por Agustín Ibarrola entre el 2005 y 2009 sobre uno de los berrocales tapizado de carrasca que visten el pie de las laderas de solana del curso alto del río Adaja.

Proyectado y plasmado íntegramente por Agustín Ibarrola, culminación de una sensibilidad donde la cohesión en la inmensidad y el vínculo con lo ancestral constituyen el emblema característico de una obra que empezó en los pinares de Oma (Vizcaya). Esta forma de activismo con el arte como protagonista junto a la naturaleza, cautiva los espacios con una particular mirada al paisaje. Recupera la estética contemporánea que fundaría el Equipo 57 y corre en paralelo a su arte con el compromiso de reivindicar el papel social de lo marginal y las raíces rurales de la cultura. Su pretensión es abrazar toda la singularidad geológica de la sierra y convivir con las pinturas rupestres prehistóricas de enclaves cercanos. El conjunto, formado sobre unas once hectáreas recoge más de un centenar de composiciones, intituladas para involucrar al espectador en el proceso creativo. Utiliza contraste basado en negativos y positivos, o entre la interacción entre lo cóncavo y lo convexo, subrayado por una gran variedad de color. Dichos motivos dialogan de fondo con los roquedos y sus sinuosas esculturas naturales a través de una pintura vivísima que resalta audazmente con el paisaje y la luz cambiante que inunda el valle en el paso de las estaciones y los días.

Ibarrola descubre el paisaje de dehesa y los granitos repartidos por la misma y se aproxima además a la historia de la zona, interesándose especialmente por los castros vetones localizados en el valle. Esta conjunción de elementos le inspira para iniciar un trabajo que se prolongaría hasta el año 2009 y que le llevaría a realizar más de 115 obras en las piedras de la dehesa.

Ibarrola construye su pensamiento desde la abstracción, cuya plasmación plástica trata de transmitir valores como la libertad y el respeto, ideas fundamentales en la obra del artista.

La visita comienza en una caseta de recepción basada en el nulo impacto ambiental y la autosuficiencia energética, vallado perimetral e itinerario jalonado de hitos, numerando cada una de las paradas al hilo de una audioguía de descarga gratuita.

Recomendaciones de visita

El recorrido se realiza a pie por la dehesa por lo que es aconsejable utilizar un calzado apropiado para el paseo.
Se trata de un espacio al aire libre, por lo que es recomendable disponer de la ropa adecuada en función de la época del año.
Existen caminos que ayudan a poder realizar el recorrido con comodidad y orden.
El espacio se encuentra delimitado perimetralmente por un vallado que impide que se puedan producir pérdidas en la dehesa.
La dehesa es un espacio natural. Procura que tu presencia no deje rastro para garantizar la conservación del mismo.
Durante el recorrido está permitida la realización de fotografías y videos sin fines comerciales.
Conserva las pinturas. Son un patrimonio de todos. Gracias por tu colaboración.